Ir al contenido principal

Hola mi amor!

Estoy recordando las veces que hablamos por teléfono, el sonido de tu voz y lo feliz que me pone oírla. A veces me digo a mi mismo, que suerte tengo de tenerte a mi lado, en ocasiones cierro mis ojos de una manera muy suave y suspiro, y te veo en mi mente abrazándome de tal manera que pareciera que te fundieras conmigo y fuéramos uno solo. Casi puedo sentir tu calor y tu respiración y puedo ver tu mirada de amor y ternura dándome una paz infinita haciéndome sentir que si estoy contigo nada malo me puede suceder.

Es como soñar despierto y es un sueño tan dulce que quiero seguir soñando que pronto muy pronto te tendré entre mis brazos, y que podremos ver nuestro primer amanecer cerca el uno del otro en cuerpo y alma.

Mi amor te amo demasiado, confió ciegamente en ti; estoy en tus dulces brazos los cuales cada día me entregan un amor sin reservas, sin pedir nada a cambio, pero que igual yo retribuyo con ese mismo amor y entrega.

Eres lo más bello y realmente especial que me ha podido suceder. No sabes cuanto dolor, lágrimas y sufrimiento he tenido que pasar para poder hallarte y doy gracias a Dios por que ahora eres mi felicidad, la razón por la cual sonrió cada mañana y busco ser mejor cada día.

No hay nada más importante para mí sino hacerte feliz y cuidar de este amor que hay entre los dos para que nada lo dañe.

Amor si supieras, si tan solo lograras imaginar como se siente mi corazón en este momento, palpita de una manera tan dulce, tan tierna con un tibio calor que lo cobija, eso hace tu amor por mí.

Quiero verte a los ojos para que con ellos me digas que me amas sin necesidad de pronunciar una palabra y lo confirmes con un tierno beso que me robe la razón y el sentido del pasar del tiempo.

Eres la única mujer al que he amado de esta manera no creo que pudiera vivir sin ti ya nunca mas.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Desvelo...

Muchas noches permanecì despierto, pegado al telèfono, esperando que en cualquier momento llegarìa tu llamada para decirme que tenìas miedo, que te sentìas sola, y con esa llamada buscaras mi abrigo, mi protecciòn, mi compañìa, muchas veces te la di, platicabamos durante horas hasta entrada la madrugada, otras tantas veces hasta ver el amanecer, y las horas pasaban desapercibidas, apenas me llegaba el cansancio, siempre habìa algo de que platicar, que recordar, siempre risas y encuentros, pasaban los minutos volando, y al otro dìa empezar la jornada apenas sintiendo el desvelo, habìa energìa suficiente con pocas horas o mìnimos minutos de sueño y quizà sin dormir, para estar activo durante el dìa, siempre sonriendo, siempre contento... Mis ojos se enmaracaban con ojeras, es cierto, pero eran hermosas ojeras pues alguien me robaba el sueño, y eso me hacìa inmensamente feliz, estoy acostumbrado a

Nada podrá separarnos

Ni siquiera la distancia, ni la lejanía. Aunque no estás aquí conmigo, y aunque no esté yo, estoy contigo. Estamos lejos, pero no estar juntos no es excusa para el olvido del amor. Es más, debemos luchar porque nuestro querer sobreviva. Sí, te echo de menos, cada día más, y moriría si pudiera abrazarte cada día, pero no puede ser. Y resignándome acumulo deseos de reencontrarte, y cuando nos reencontramos, morimos de amor. Siempre estoy contigo, siempre estarás conmigo, Nuestro amor nos une, y ni la tristeza ni la añoranza pueden separarnos, el amor lo puede todo. Nada ni nadie nos separará jamás, porque te quiero y porque me quieres.

Eso que sientes es....

Piensas todo el día en esa persona, intentas tomar el aire entre tus dedos, vas sonriendo todo el día sin una causa aparente, corres, vuelas, gritas, te desesperas y te ríes de ti mismo, sientes mariposas en el estomago cuando la ves y un hueco en el pecho de emoción cuando sabes que ya va a llegar, te vuelves adolescente una vez más, intentas rayar tus papeles de trabajo con su nombre, lo borras, te sorprendes pensando en ella cuando estabas concentrado en tu trabajo, tienes problemas y de repente su imagen aparece y todo, absolutamente todo esta bien, y sientes unas terribles ganas de abrazarla y te pones nervioso si estas con ella, y el mundo se te pone de revés, y nada pasa y todo pasa y hablas de incoherencias con sentido, y te sientes grande, gigante y niño a la vez, y te recargas en la pared.. la piensas.. la extrañas.... Y ves una flor y la arrancas, y te vuelves cursi, y si suena el tele