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Entre el infierno y la nada

No se veía nada. Era la oscuridad más absoluta que había visto nunca... Incluso creía que estaba ciego, pero vi una luz al final del enorme pasillo. Todo estaba iluminado, pero pareciera que estuviera en la nada misma. No había ni paredes ni suelo, sólo sentía un frío intenso... muy intenso.... por alguna razón aquella luz me llamaba. Fui andando lentamente, buscando señal de alguna otra criatura, para saber que estaba en el mundo. Me detuve en seco..... ¡Esto debería ser un sueño! ¡No podía ser verdad!.... De repente traté de recordar que había hecho antes.... un intenso dolor me recorrió el cuerpo.... No, no recordaba nada. Lo intenté otra vez con más esfuerzo..... el dolor se hizo más intenso.... ¿Qué me podía estar pasando? En un instante empecé a sentir miedo. No recordaba nada... Ni siquiera sabía donde estaba. Desesperado intenté buscar alguna señal... tenía que ver alguna... pero estaba solo. Ya no podía más de dolor y agaché la cabeza. Al ver esto casi me quedé sin respiración....¡no veía ninguna parte de mi cuerpo!. Ya no tenía nada más que perder... Estaba solo y destinado a morir....¡A morir! ¡Eso era! De repente lo recordé todo: Iba caminando por la calle, iba muy preocupado. Volví la cabeza: eran dos tipos, uno uniformado y otro bajo y regordete. Por alguna razón me asusté...¡Si! ¡ Ya recordaba por qué! Yo iba caminando sin rumbo...Salí corriendo a toda velocidad...Vi un revólver, pero ya no me quedaba tiempo.... De repente, sentí un intenso dolor en el pecho.... Sí, me habían disparado. Sin previo aviso, caí al suelo y puse la mano en mi pecho. La vi. Estaba llena de sangre. Me sentía cansado...muy cansado. Había un grupo en torno mío... Escuche a gente lamentarse.... pero otra vitoreaba .......Ya no vi más... Fui cerrando mis ojos lentamente......De repente me encontré en la nada.....¡Por fin lo había recordado!..... Después de pensarlo ya no me sentía tan feliz... Estaba muerto... En el famoso túnel con la luz que te llama.... Me dolió más la cabeza. Mientras caminaba rumbo a la luz empecé a pensar... Mi vida no tuvo muchas buenas acciones, en realidad ninguna.... Fui cobarde... fui veneno.. Ahora que lo recordaba hasta fui maldito... No creía que fuera al cielo... Tras un idea brusca de devolverme, vi pasar ante mí miles de imágenes de mi vida... Estaba en un lugar y en otro... siempre triste...llorando o lastimado....Cerré y abrí los ojos para ver si era un visión... Ya no había ninguna imagen, sólo la nada y la luz... Pensé que debería estar preparado para mi destino, y me armé de valentía, ya no me importaba que me pasara.... No tenía qué pensar... mi vida no había sido de bien....... pero creí que estaba preparado para el infierno. Seguí andando. Estaba muy arrepentido de las cosas que había hecho en mi vida, pero sabía que ya no valía. También sabía que estaba arrepentido sólo porque no quería irme al infierno... y no de verdad. Este pensamiento me incomodó. Seguí caminando. Pensé: ¿alguna vez me había arrepentido en mi vida? ¿y cómo podía hacerlo en mi muerte? Seguí caminando. Distinguí una sombra... ¿qué era? Me acerqué un poco más. Se movía....¡Era una criatura! Me acerqué más....Era un niño. Estaba descalzo y vestido con harapos. Estaba tirado en el suelo, llorando. Por alguna razón sentí compasión. Era nuevo para mí. Me agaché y lo ayudé a levantarse. -¿Por qué lloras? - No he comido en días -me dijo- ¿Pero es que no pasa mucha gente por este túnel?- Sí, por desgracia...- ¿Qué?- El otro día pasó un ladrón señor. Me robó mis zapatos y quedé descalzo - ¿Pero por qué hay tanta maldad en la gente?- pregunté verdaderamente emocionado- ¿Cómo puede preguntar eso?- me quedé callado por unos instantes- ¿Qué no fue usted el que camino descalzo en su vida? Me quedé impresionado con las palabras del niño. Estaba diciendo la verdad. Me di vuelta para excusarme, pero ya no estaba.... Muy preocupado seguí mi camino. Caminé, estaba solo en la nada misma. Más tarde vi otra figura. Era mujer. Le calculé unos treinta años. Gritaba desesperada. Nuevamente sentí compasión. Me acerqué a ella. -¿Qué te pasa pobre mujer?- dije yo, pero la única respuesta fue un grito desesperado- Por favor, déjame ayudarte- repetí- no te haré daño. Por fin la mujer contestó: ¡Mi hijo! - sollozó- mi pobre hijo....allá abajo....- ¿qué le ha pasado a tu hijo? - A él nada - contestó- yo soy la que estoy muerta.....¿quién cuidará de él? -la mujer se dio vuelta, pero tenía la cara tapada con el pelo- ¿Quién podría tener la maldad suficiente? - La mujer se dio vuelta - ¿Qué no te acuerdas de mí? Soy tu madre y nunca cuide de ti!!. En ese momento salí corriendo, pero sentí pena. Me devolví corriendo rápidamente, pero ya no estaba. Seguí caminando, pero en un momento el camino se dividía en dos partes. La luz me atraía hacia la derecha, pero por alguna razón me fui por la izquierda. Después de cruzar esa especie de puerta, vi a más gente. Por alguna razón no había ningún niño. Sí, este debería ser el camino al infierno. Las dos puertas, de la izquierda y desembocaban en el mismo camino. Los de la derecha (todos menos yo) parecían atontados después de salir por la puerta. Vi que todos tenía un papel en la mano. Me acerqué a uno de ellos y tenía escrita la historia de una vida, una vida cualquiera. Luego el papel se consumía en sus pieles y seguían caminando. Luego razoné: todos habían pasado por un "borrado de memoria" y su vida se volvía a escribir... ¿Pero para qué necesitarán una nueva vida en el infierno? Seguí caminando.... estaba muy nervioso (si es que los muertos pueden estarlo). Vi una puerta, tenía escrito ?????????? supuse que significaba infierno. Pasé..... Al verlo no pude salir de mi asombro, estaba mareado.......... ¡El infierno era la Tierra! Corrí y corrí, sin rumbo fijo..... ¿Cómo podría ser este el infierno? ¿pero cómo.......? ¿Cómo pude vivir aquí tanto tiempo? Me fijé en los robos... la maldad... los asesinos... ¡todo cuadraba! Y así, por fin me di cuenta, que la tierra era un, o más bien dicho el, verdadero infierno.....

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